El soñador desconocido

Tras un comienzo un tanto caótico (mucho nombre rarito, la historia comienza por el final...) he de reconocer que la historia de Lazlo, el huérfano protagonista de extraño origen y fisonomía tan poco agraciada (al menos eso deduzco por su descripción) me llegó a enganchar de tal modo que me han dado las tantas de la madrugada varios días seguidos hasta finalizar el libro.

Efectivamente, el comienzo no tiene nada que ver con el posterior desarrollo de esta apasionante historia de ciudad perdida, pasión por los libros, amor, crueldad y dioses. ¡Ay los dioses! Leí en alguna ocasión que dichosos los humanos al deshacernos de ellos. Ciertamente la antigüedad que pintan en esta historia es "horripilantemente divina". Testigo de la convivencia de dioses y hombres, una ciudad de la que nadie recuerda su nombre. 

Pero, aunque la protagonista indiscutible es la ciudad, existe un protagonista humano: Lazlo, un muchacho sin pasado, sin familia, que fue acogido por unos monjes, y que vive obsesionado por esta ciudad, recluido en una biblioteca. Una visita inesperada le brindará la oportunidad de visitar la leyenda que tantos sueños le ha robado. Eril-Fane, al que llaman el Matadioses (si, algo parecido a Jaime Lannister) necesita ayuda urgente porque tiene un "pequeño" problema en su ciudad, la ciudad oculta: Llanto (con razón nadie recuerda su nombre, que triste) Para tratar de resolver el contratiempo ha organizado una expedición para encontrar a los hombres y mujeres más capacitados. 

Un constructor de torres, alguien capaz de escalarlas, un alquimista, un matemático, un filósofo, un ingeniero, un especialista en metales, y hasta un explosionista se han sumado ya a Eril-Fane, quien descubre en Lazlo la pieza que le faltaba en su grupo: el enamorado obsesionado por la ciudad que defenderá su causa hasta las últimas consecuencias. ¿Qué problema tiene la ciudad para requerir los servicios de tan variado grupo de especialistas?

Todos se llevarán una enorme (yo diría monstruosa) sorpresa al llegar, y conocerán su terrible pasado, y el motivo de que nadie quiera acordarse de su nombre. A menudo el lujo, la magia y la belleza no son suficientes para compensar la crueldad, la crueldad divina, y no queda más que la venganza. Los humanos saben mucho de ese tema, pero nadie quiere hablar del día de la matanza. Pero... ¿Quién mató a quién? ¿Los dioses a los humanos? ¿Los humanos a los dioses? Esto es imposible, ¿no?...

Minya, Sarai, Ruby, Sparrow, Feral. Estos son los Engendradioses, y cada uno de ellos tiene un don: fuego, vida, sueños, viento... Nadie sabe de su existencia, los creen muertos, pero como veremos, como comprobará el mismo Lazlo, esto no es así. Lo que él no sabe es que la chica con la que sueña, y cuyo rostro es encantadoramente azul, es una diosa, y granjearse su amistad le llevará a cometer un terrible error: creer que todos los humanos, todos los dioses son amables, razonables y bondadosos. Nada más lejos de la realidad. (Tit: El soñador desconocido. Taylor, N. Alfaguara, 2017)