La casa de la colina negra
Trepidante, entretenida, emocionante, intrigante, original...me recuerda mucho a la obra de Michael Scott sobre Nicolas Flamel, pero, precisamente por ello es fascinante, como lo son los libros del autor irlandés, y en este caso más recomendable aún por tratarse de un autor español (hay que hacer patria siempre, si merece la pena ¡claro!, y en este caso no tengo ninguna duda).
"- Si la haces estallar regresaremos a la Telaraña - le explicó en un susurro. Durante un instante tuvo la tentación de buscar algún nuevo argumento para convencerlos de que estaban a punto de cometer una locura..."
Porque volver a la Telaraña significa que la plácida vida que llevaban hasta ese momento desaparecería, y todo por salvar a alguien que ya está muerto....¿Cómoooooooo?. Pues si, así es, y es que la casa de la colina negra no es una casa cualquiera, no, es una casa mágica y sus ocupantes no lo podían ser menos: un hada, un mago, y un mestizo, Víctor, su hijo y causante de todos los problemas, muy a su pesar, que tendrán, o que han tenido a lo largo de toda su vida, pero de eso ya se enterará el mismo cuando todas las criaturas del Inframundo se interesen en su persona, o mejor dicho, en su sangre. ¡¡¡¡Otra de vampiros!!!!. No, paciencia.....
A todo ello se le suma Paula, un fantasma que la casa adopta, si, habéis oído perfectamente, ya he dicho que la casa era mágica, así que...¿porque no iba a tener la capacidad de adoptar a un fantasma si lo necesita?. Y bien que lo necesita porque la Sombra la persigue para arrancarle la verdad sobre la cabeza del Minotauro que, en realidad es la suya (Pufffffff!!!!!!). Y si pensáis que todo acaba aquí...vais listos!!!!!
Un tiburón en la piscina, un tío arqueólogo que puede abrir portales telúricos, una presencia maligna encerrada en los sótanos de la casa, un accidente de bicicleta, un secuestro... Las últimas páginas de esta historia son escalofriantes, pero lo peor.... es que se acaba.¿O no?.....
(Tit: La casa de la colina negra. Cortina, J.A. Alfaguara, 2006)
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